LA CONVERSIÓN DEL PRESIDENTE

 Por Rafael Fernández

Pablo de Tarso, que en sus años mozos disfrutaba persiguiendo cristianos, sufrió un día una caída del caballo con experiencia mística [Hch 9, 3-19] y se convirtió en el primer apóstol de los gentiles. Nuestra historia guarda mucha semejanza con aquélla.

Lorenzo Veneziano Conversión de Pablo. 1370 Staatliche Museen, Berlin.

Nuestro Presidente disfrutaba pergeñando las siguientes obras de metamorfosis para nuestra urba:

Envolventes de los edificios; geotermia (entre 35 y 105 pozos de unos 120 m de profundidad); aerotermia (una caldera de gas por edificio); dependencias auxiliares para la maquinaria; vuelta a la calefacción central, "mochila" de agua caliente reemplazando la caldera individual; radiadores XL o fancoils o suelo radiante; paneles solares fotovoltaicos y térmicos; baterías de nueva generación, baterías virtuales, contadores del gasto de  cada vecino; cambio de barandillas en terrazas, cambio de toldos; traslado de los aparatos de aire acondicionado a la azotea. Con las subvenciones saldría todo a coste cero o muy reducido.

 

Fantasías sin fronteras. Olvida que las calabazas se convierten en carrozas sólo en los cuentos; y que, aun en ellos, la magia dura sólo hasta la media noche. Por fortuna, algún accidente providencial como el de San Pablo le convierte de pronto en un expresidente nuevo, hasta el punto de que acaba predicando todas las obras que antes había olvidado. Nos deja estos deberes:

 

"Corrección de defectos detectados en la revisión de las instalaciones eléctricas (OCA); aislamiento de los bajos; renovación de contadores individuales de agua; reparación, a requerimiento de la Administración, de las deficiencias ‘graves’ detectadas en el Informe de Evaluación de Edificios; pintura, reparación y saneamiento de barandillas de terrazas; impermeabilización de cubiertas; arreglo de las pistas de tenis; renovación de carriles de ascensores y otras reparaciones que resulten necesarias; renovación de los baños de la piscina; saneamiento del cuarto de máquinas de la piscina; renovación del motor de la depuradora; renovación de los cloradores salinos; renovación del vallado interior de la piscina; renovación de las tuberías de distribución de agua a las viviendas; reparación del pavimento de las rampas de acceso a los garajes dañado en el último temporal de nieve; compra de un limpiafondos con la potencia adecuada para el tamaño de la piscina; reparación e impermeabilización de las jardineras que quedan pendientes de renovar; saneamiento de muretes en mal estado en el 48, el 50 y el 52; reconstrucción y saneado de la galería de unión entre el 48 y el 52-54, que presenta riesgo de derrumbamiento; saneado y pintura de las tuberías de distribución de gas; instalación de una batería de condensadores para reducir el consumo de energía reactiva de los motores de las instalaciones comunes; impermeabilización de los puntos de los garajes donde aparecen humedades; pintura general de los garajes; revisión, reparación o reconstrucción de arquetas de garajes; reasfaltado del pavimento de los garajes; renovación de las puertas de entrada a los portales; redacción de las partes restantes del libro del edificio existente pendientes de finalizar (solo llegó a encargarse una de sus partes, el IEE/CEE); compra de un nuevo tractor cortacésped; replantado de césped en zonas deterioradas". (Acta de 12/nov/22.)

Convertido en apóstol del mantenimiento, nos apercibe además de que el “coste total puede ser superior a 1.500.000 €” (el presupuesto aproximado de siete años, los que estuvo hasta la caída).

Converso el Presidente, la comunidad le amnistía. La comunidad olvida, sin embargo, que él por sí solo nunca habría podido acercar nuestra urbanización a la bancarrota; contó con el apoyo de seguidores fanáticos o interesados. Y de éstos no hay indicios de conversión.

Rafael Fernández, 28 de diciembre de 2023